La carrera por estar bien.

Posiblemente como muchos de ustedes me han compartido, la felicidad es subjetiva, lo vivimos como concepto, meta, camino, posibilidad o forma de vida y comulgo totalmente con esta idea.

El bienestar, que está relacionado con la Felicidad, definitivamente también representa para cada uno de nosotros algo diferente: Estabilidad económica, sentirse bien consigo mismos, relaciones personales satisfactorias, Éxito profesional etc.

Ahora, ¿Cómo se obtienen? ¿Cómo se llega a ellos y la pregunta más inquietante ¿Cuánto nos desgastamos algunos en la búsqueda frenética del estar bien?

Si bien esta es una época en la que conceptos como el Mindfulness, Pensamiento positivo, Ley de atracción, Trabajo por metas , Humano multitasking, Triunfar sobre el miedo, nos han llenado de herramientas como Libros, cursos, Programas de meditación, programas de Desarrollo, Incluso apoyo de Coach ( que sin duda son recursos que abren las posibilidades de crecimiento humanístico al que décadas atrás no se tenía fácil acceso o bien su enfoque no era tan realista) la inquietud no es enfocada hacia estos recursos sino hacia, como siempre debe ser, la responsabilidad y el peso que nosotros le damos en nuestro desarrollo diario.

Es decir, contando con tantas herramientas y apoyos, ¿Cuánto realmente de nuestro criterio y sentido común, de nuestra responsabilidad sobre su aplicación y sobre todo de nuestra dependencia aplicamos en el empleo de estos?

¿Cuánto en nuestra vida diaria cedemos a la presión o nos inventamos una presión particular por “Estar bien”?

Te has preguntando cuantas veces te limitas a solamente tomar lo bueno de cada cosa que sucede, a no dar señales de inconformidad, sufrimiento o simplemente esconder el tener un mal día detrás de una sonrisa forzada o una publicación de falso positivismo que lo único que haga es disfrazar las emociones negativas que – cabe decirlo- todo ser humano vivenciamos.

¡Si! Eres un ser humano en desarrollo, estas cuidando tu mente, tu cuerpo, estas llevando a cabo acciones que te acerquen cada día más a tu meta, hoy mismo en esta época de cuarentena, posiblemente estés buscando una y mil formas de aprovechar el tiempo para crecer, pero, ¿Qué te motiva a hacerlo? Es algo auténticamente interno o estas siendo movido por el “deber ser” de aprovechar cada segundo, de no perder estos meses de confinamiento sin “hacer nada de provecho” ¿Son tus ganas de sentirte bien o es la presión de estar bien porque es tu deber? porque lo tienes todo para hacerlo así que ¿por qué no aprovecharlo? ¿Estas vivenciando realmente el placer de tener un hobbie, desarrollar un trabajo, nuevo o que ya tenías en proyecto, hacer ejercicio, meditación, aprender algo nuevo? ¿O simplemente estas acumulando logros cumplidos aprendizajes amontonados para que el registro diga que “Estas siendo una persona feliz y te estas desarrollando”?

Aquí me gustaría que te plantearas el cuestionamiento principal que quiero compartirte ¿Te sientes presionado a estar bien o a ser feliz? ¿Sabes reconocer tus emociones negativas cuando es necesario darles su lugar y vivenciarlas para que puedan llevarte a la verdadera necesidad de tu Ser?

Muchas veces como seres humanos que queremos tener logros y crecer, nos dejamos llevar por la presión social o de nuestro círculo más cercano a estar felices y estar bien, sin embargo, como te comentaba al inicio de este Post, la felicidad es relativa, es un “algo” diferente para cada uno de nosotros y solamente cada uno puede saber y sentir legítimamente que le está haciendo feliz.

Si estas en este camino del Desarrollo Personal y la búsqueda de plenitud, ¡Te felicito! Soy una fiel creyente de que siempre nos hace bien ir por más, empero, diría que lo perjudicial es caer en la trampa de la Presión por hacerlo, de cumplir expectativas y estándares que no son los nuestros o que nos han sembrado .

Creo fielmente que cuando nos perdemos en cumplir estos estándares y expectativas validos para otros y totalmente respetables, pero que no son los que nuestra mente y nuestro corazón necesitan para sentirse plenos, nos empezamos a perder en esa búsqueda de bienestar.

Entonces mi invitación sería ¡Vive plenamente! Pero de verdad, con los días malos, buenos y mejores, con las emociones positivas las negativas, con los días de levantarse a comerse al mundo y con los días de dejarlo tirado porque las fuerzas no te dan, y ¡Date permiso por favor! Deja de regañarte por a veces no estar bien, porque entonces , cuando vemos una sola cara de la moneda como única opción, comenzamos a retroceder en este camino maravilloso del Crecimiento Humano.

Y ¿qué mejor que vivir, ir venir, volver y crecer con esa maravillosa y multifacética persona que eres?